Del polifónico imaginario de Alexandre Deulofeu (VII).
Zapatero & Rajoy o l’herència de Cánovas i Sagasta.
Juli Gutièrrez Deulofeu
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Zapatero & Rajoy o la herencia de Cánovas y Sagasta.
El 29 de diciembre de 1874 el general Martínez Campos proclamó en Sagunt a Alfonso XII como rey de España. La Restauración borbónica, consecuencia de los fracasados ensayos anteriores, suponía un sistema nuevo basado en el equilibrio entre dos fuerzas aparentemente distintas. Comenzaba el pacífico turno de partidos, de gobiernos, ahora, por fin, civiles. Quería alejarse para siempre, lo cual no se consiguió, el ruido de sables, la intervención de los militares. Se firmaba el llamado Pacto del Pardo entre el partido conservador de Cánovas y el partido liberal de Sagasta. En este juego de equilibrios, quedaban fuera los dos enemigos del nuevo régimen: por la derecha los carlistas, por la izquierda los republicanos. Pues bien, bajo este sistema el último cuarto del siglo XIX ofrecía una estabilidad casi completa. Se demostraba una vez más que estabilidad y prosperidad suelen ir de la mano.
Será ahora cuando la burguesía cogerá un protagonismo determinante y, en las zonas más deprimidas, casi en todos sitios, el caciquismo se instaurará como forma perversa del nuevo sistema. El capitalismo aparece por primera vez en España y lo hará sin calibrar las futuras consecuencias. Efectivamente, el crecimiento económico marcadamente unidireccional provocó la bipolaridad de la sociedad. La industrialización alienaba cada vez más a les masas proletarias que veían como sus necesidades no eran las de aquellos que mandaban. Su redención pasaba por las propias manos, no podía confiarla a nadie más. Nadie se dio cuenta, o quizá sí se dieron cuenta y decidieron aprovechar la coyuntura en su beneficio propio. Las revoluciones, siempre, siempre son burguesas.
La estabilidad económica no podía durar siempre, porque nunca ha sido posible. Fue la pérdida de las últimas posesiones coloniales, sobre todo la manera como se produjo, el catalizador que volcó a España a una larguísima crisis, la consecuencia final de la misma fue la Guerra Civil. ¡Caramba con el bipartidismo!.
Sin duda, el impacto moral de la pérdida de Cuba fue más grande que no el económico, pero España vuelve a equivocarse y, como hizo el Conde-Duque de Olivares, volvió a buscar la solución a su miseria en Cataluña. La respuesta catalana no se hizo esperar, –Se cierran las cajas–. Qué valor, el de nuestros antepasados. Pero los problemas justamente empezaban. Pocos años más tarde el cierre de la revista el Cu-Cut y la consiguiente ley de Jurisdicciones provocaron el nacimiento de Solidaritat Catalana. Cataluña todavía estaba viva.
Día 9 de marzo de 2008. Elecciones generales. La realidad confirma los peores presagios, se consolida el bipartidismo y se castiga a aquellos que erraron el camino. Lo comentaba un día con el amigo Martí Armadà, alcalde de Vilabertran. –Éste no es el camino– le decía. Nos acompañaba un dirigente provincial de Esquerra. No nos hacían demasiado caso. El tiempo me ha dado la razón, el batacazo es muy importante, pero servirá para poner a todos en su sitio. Hay que empezar a coger las riendas del futuro si no queremos ser arrastrados por el mismo. Pero ahora el panorama no es nada halagüeño. La presencia de la periferia en el Parlamento ha sido reducida prácticamente a la nada. Solamente Convergència se salva. El presidente Montilla se llena la boca hablando del catalanismo socialista en Madrid. Francamente, pienso que nunca, nunca, el PSOE catalán ha votado en el congreso de manera diferente al PSOE de Madrid, por lo cual queda claro que no se puede contar. Curiosa estrategia la del PSC. Por las calles estos días vemos las fotos del futuribles parlamentarios gerundenses acompañados de sus cabezas de fila. Canet-Ridao; Xuclà-Duran; Sanchez-Rajoy; ?- Herrera. Lógico y normal, pero curiosamente la pareja del PSC eren la Chacón y Zapatero. Particularmente Vilafant se vio inundada de los colores rojos y blancos de la propaganda socialista. Pero ninguna referencia a la realidad gerundense. El jacobinismo de esta gente roza la enfermedad. Y sorprende que haya gente catalana apoyándoles. Que asuma esta falta de respeto por el territorio, claro que esto no nos ha de extrañar si damos una ojeada a un documento llamado «P.D.U.S.U.F.1» y a quién han sido los principales impulsores, pero dejaré para otro papel este tenebroso asunto. De hecho, el PSC tampoco tuvo ningún escrúpulo a la hora de asesinar políticamente al presidente de Cataluña, Pasqual Maragall. Pero curiosamente han conseguido en Cataluña una victoria sin precedentes. La Cataluña con ganas de reír, o la de aquellos catalanes, o de gente que vive en Cataluña que se burla de la misma. Y aquí ERC se lo habría de hacer mirar. Estoy convencido que son muy pocos los votantes de Esquerra que han votado al PSC. Es mucho más probable un traspaso de votos hacia CiU, que ahora tiene la posibilidad de recuperar, consolidar un espacio político en Cataluña, pero solamente lo hará bien si no olvida que lo más importante es Cataluña. La Cataluña vernácula, y que entienda quien quiera o pueda. ERC no lo entendió y ahora se ha confirmado la fractura. Estoy convencido que muchos votantes independentistas, que hay muchos, no han ido a votar. Que quien realmente se ha movilizado es el voto españolista. España continua haciendo su labor… ilegaliza partidos y después lamenta la muerte de un pobre hombre, que solamente como dice la canción, «pasaba por allá». Se me termina el papel, y ya continuaré otro día, pero la sombra del Pacto de El Pardo es demasiado alargada, y los días de estabilidad económica y social están tocando a su fin. Hay que estar muy atentos a lo que se avecina.
Juli Gutièrrez Deulofeu.
Publicado en el Setmanari de l’Art Empordà (Semanario del Alto Ampurdán).
1(Plan Director Urbanístico del Sistema Urbano de Figueres).
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