Suplemento del Correo Catalán. NUM. 70 – 03 de junio 1976
Reunión con el doctor Alexandre Deulofeu.
Una impresión superficial del doctor Alexandre Deulofeu nos podría llevar a la conclusión de que nos encontramos ante un sabio pintoresco, dedicado a escribir libros en su Masía de Ordis, después de su tarea cotidiana de farmacéutico de Figueras. Mezclando la matemática con la historia y la biología con el futurismo, el ampurdanés de setenta y dos años nos cuenta con entusiasmo juvenil el contenido del séptimo volumen de la colección «Matemática de la historia» titulado. Cataluña, madre de la cultura europea.
Al ritmo que empezamos la conversación y nos adentramos en la problemática de la cultura sumèrica, egipcia, griega, y analizamos los imperios turco, austriaco y los pueblos nórdicos y eslavos me he sentido cautivo de sus amplios conocimientos y el esfuerzo titánico empleado en el mundo árido y complejo de la investigación.
LOS PROCESOS BIOLÓGICOS Y MATEMÁTICOS DE LA HISTORIA
—¿Cómo y por qué relaciona los procesos biológicos con la matemática y la historia?
—La historia se mueve en unas marcas de tiempo, de épocas, similares a los procesos biológicos y éstos quedan condicionados por la matemática. Tengamos en cuenta que todos los imperios que han existido en el mundo han seguido procesos biológicos perfectos. Es más, todos los imperios han pasado por las mismas fases: una ciudad hegemónica amplía su preponderancia sobre la ciudades vecinas en un proceso de expansión. Después salen los factores internos que producen las grandes depresiones motivadas por el capitalismo y el proletariado, la pugna entre las ciudades y los pueblos que quieren liberarse y sobre todo, el deseo de un poder personal. Estos tres factores producen una depresión enorme, el imperio se hunde; emerge de nuevo, nace la decadencia hasta que después de 550 años viene la desintegración total.
El doctor Deulofeu me explica cómo sus estudios de ciencias químicas le llevaron a la conclusión de que los procesos biológicos se rigen por leyes matemáticas, como en el fenómeno de la reproducción de las diversas especies. Los ciclos colectivos ha aplicado los procesos biológicos, después de estudiar las culturas más importantes de la especie humana. Comenzó con la griega, donde dominaron sucesivamente la aristocracia sacerdotal, la de la riqueza, la democrática, la «polis» y la clásica cultura griega que se produce en un fondo de fragmentación política total; después nace una hegemonía en todos conceptos -económico, político, social, filosófico- que se mantiene durante seis siglos. Primero intenta la hegemonía Atenas, en segundo lugar Esparta y, finalmente, Tebas de Macedonia, que queda sometida -después del desastre militar mencionado en el proceso biológico general- al imperio romano. Me demuestra su teoría de los ciclos históricos en el desarrollo de la cultura egea, la preponderancia jónica y dórica y similares. Y explica muy extensamente la denominada cultura sumeria de la antigua Mesopotamia, entre el Tigris y el Éufrates, donde también se constatan los tres ciclos, al igual que en el egipcio.
CATALUÑA, MADRE DE LA CULTURA EUROPEA
—Cataluña, decís, es la progenitora de la cultura de Europa. ¿En qué se basa, cuáles son los fundamentos, las premisas de su hipotético silogismo? ¿Cuál es su argumentación?
—Todo el mundo decía, al principio, que nuestra cultura -la que decimos románica- venía de Italia o Francia, y más concretamente, de Monte Cassino, de Lombardía. Entonces busqué los primeros monumentos románicos: en Monte Cassino no encontré nada, pues todo era neoclásico. Incluso estudié unas excavaciones en los cimientos: nada de románico. Ni allí ni en los contornos. El año siguiente fui a Toscana.
—¿Qué año era?
—Ahora sí que me ha jodido -me respondió todo serio el doctor-, yo para las fechas son muy difícil. Bueno, tendría unos veintitrés tres años. Ni en Pisa, ni en Florencia encontré un románico bastante puro. Finalmente, en un tercer viaje al norte de Italia, fue mi objetivo la Iglesia de San Ambrosio de Milán, de estilo románico, pero era un románico del año 1080. Después vino mi exilio, que pasé en Francia, porque era un político de izquierdas. De estos nueve años, cuatro trabajé en la Universidad de Montpellier, investigando, y los cinco años siguientes todo ganándome la vida como músico profesional en la orquesta del Conservatorio de Montpellier y haciendo tournées por toda Francia, especialmente en el sur. Era en el tiempo de la invasión hitleriana y, a los alemanes, les gustaba mucho la música. En el tiempo libre recorrí todos los monumentos e iglesias relacionadas con el románico. Toda mi finalidad era encontrar el centro del segundo ciclo de nuestra cultura occidental, después de la ibérica establecida en Almería, Alicante y Andalucía. Después de estudiar muchas iglesias románicas de Cataluña, comprobé que nuestro país es el lugar donde nació el románico. Son catalanes los primeros arquitectos del románico. Como el Abad Garí, los pintores de la biblia de Sant Pere de Roda, y escultores con Ramón de Bianya, los primeros filósofos, Ramon Llull y Ramon Martí. Podemos afirmar que Cataluña mantiene la preeminencia creadora hasta finales del siglo XV.
SANT PERE DE RODA, CUNA DEL ROMÁNICO
—Me ha mencionado Sant Pere de Roda, ¿qué representa este famoso monasterio para nuestra cultura catalana?
—Sant Pere de Roda representa la cuna de nuestra cultura y es el más antiguo monumento románico, pues data de los siglos VI y VII. Allí se constata el opus spicatum, es decir, obra hecha en forma de espigas, símbolo cristiano. Estos datos constan en los documentos de la consagración de esta iglesia y especialmente -porque tiene un interés extraordinario- en las actas del concilio en tiempos de Bonifacio IV, que hizo construir este templo para guardar los restos de San Pedro y otras reliquias. Aunque en principio se esperaba llevarlas a Francia, al tener que descansar, los monjes, del largo viaje cerca de Rodas, creyeron que era un lugar muy idóneo paradejarlas allí. Volvieron a Roma y Bonifacio IV aprobó esta decisión y mandó construir los monjes este célebre cenobio. Este monasterio fue un centro de irradiación de cultura y así tenemos la mencionada biblia de Rodas, que se guarda en la Biblioteca Nacional de Paris. En el campanario aún se pueden ver una sirena y una cabeza de hombre barbudo, que son de las primeras esculturas figurativas que se conocen.
EL FUTURO ESPLENDOROSO DE CATALUÑA
—Decís que con el conocimiento del proceso biológico de los imperios se puede precisar los hechos que se producirán los próximos años y en los siglos venideros. ¿Cuál es el futuro de Cataluña como país y estado?
—En la cultura occidental, en el segundo ciclo que comprende desde el 800 al 1479, España está fraccionada en reinos, mientras que Cataluña es y representa el centro de la cultura para España y el resto de Europa. Tras el 1479 nace el ciclo imperialista -concretamente el de Castilla, el francés, el inglés- y todos estos imperios deben durar 550 años. Por lo tanto, el año 2029 cambiarán las estructuras, pero no significará la libertad completa para Cataluña. Sin embargo, tendrá un gran papel en todo el mundo, que reconocerá que nuestro país ha sido el centro de la cultura europea. Mientras se desintegrará la URSS y los pueblos liberados pasarán al segundo ciclo de la cultura eslava. USA entrará en la gran depresión. Alemania acentuará su hegemonía sobre Europa; Inglaterra y Francia se volverán cada vez más débiles. China y Japón tendrán el predominio en Asia. Y el tercer ciclo traerá para Cataluña la recuperación total y volviera a ser el centro cultural de Europa y del mundo entero.
CONSONANCIA PARA LOS GOBERNANTES Y POLÍTICOS
La conversación con el ex-alcalde de Figueres y escritor ha vuelto viva, casi apasionada. Ya no es el tono del científico, sino del hombre que siente la política en lo más profundo de su ser. Si la decadencia de Francia, Inglaterra, Estados Unidos y la URSS son un hecho futuro, pero irreversible, hay que tener en cuenta esta futura realidad, para evitar catástrofes o, al menos, evitar eventos sin modificar el proceso inmutable del historia, me dice. Comentamos si el Estatuto del 32 será pronto un hecho o no, si en el tercer ciclo seremos republicanos o monárquicos, de los habitantes de otros planetas, del hecho biológico y la libertad del hombre. De la técnica de los egipcios, de su conocimiento de la electricidad, los reactores del tiempo de Moisés y de la destrucción de Babilonia por bombas atómicas. ¿Cuáles son los límites de la ciencia? ¿Donde llega la ciencia ficción y la realidad? ¿El futuro y el presente? ¿Las hipótesis y las tesis? Nos prometimos con el doctor Deulofeu que ésta sería materia de otro libro o quizás de otra colección. O simplemente de una larga conversación en el Mas de Ordis, a pocos kilómetros de la capital del Empordà.
J. Barcon i Prebosti.